Idos y venidos. Retrato gráfico de una sociedad dividida,
que ante un momento histórico vuelve a demostrar que nos bifurcamos sin
remedio. Asumo mi miedo ante el fin del estado de alarma y era de esperar que
el cazurrismo se manifestara. Incluso en masa. ¡Qué triste! ¿No hemos aprendido
nada? Esa gente, porque se han cebado con imágenes de jóvenes, pero no dudo que
hubiera mentecatos que peinaran canas, celebrando cual hito futbolístico este
momento crucial. De película de terror.
El contexto nos define y los hechos van más allá del
titular. Se trata de vidas en peligro y esto no es un videojuego en el que
pasarse pantallas. Responsabilidad y sentido común, un mix que parece
inalcanzable para esos seres (lo de humanos les viene grande) que no conocen la
palabra empatía. El camino se demuestra andando y lo de tomar direcciones
opuestas nos puede salir muy caro. ¡He dicho!
No hay comentarios:
Publicar un comentario