martes, mayo 13, 2008

A mi me dan dos, o tres, o más...

Debe ser que la vice pasada por agua no está acostumbrada a otras realidades. O que ella es una single concienciada, toda vez negada su supuesta bollería fina y deportiva. Y es que ha saltado la polémica cuando en uno de sus viajes de estratosfera no nacional se topó con un hombre polígamo. Allí se presentó él al evento con sus esposas, en la naturalidad de su costumbre, que a los ojos de la mandamasa no eran más que sus hijas. Pero ay, amigos, el grito en el cielo de la sociata poderosa sonó tan fuerte que no me extrañaría que provocara seísmos varios. Aunque la actualidad no está como para frivolizar sobre esto.

El tema es que Ladie DeLa se ha sentido horrorizada, según sus palabras, a posteriori. Una vez fue informada de la situación esposoria múltiple. Y puede que sea normal, en su condición de feminista (que no femenina) a ultranza. Aunque claro, todos debemos aceptar los usos y costumbres de allá donde fueres. Que no implica que haz lo que vieres. Quizá metió la pata al no ser consciente de la situación y ahora quiere ir de coherente de su causa. En fin, que tampoco creo sea tan grave si esas mujeres han asumido su papel y saben el juego a bandas de su esposísimo.

Lo curioso es que adelantándome a los acontecimientos, en la noche del sábado tuve ocasión de tener un cara a cara con un practicante de la poligamia a escala real, con tres piezas. Eso sí, en realidad era un novio pone cuernos con dos más, que aceptan la situación mientras él sigue el juego y declara su adicción al frenesí horizontal. Pero claro, la novia oficial de siete años no se entera o no quiere enterarse de este triplete cardiaco de su hombre. El mismo que declaraba haber sido un bobalicón con su primera compañera sentimental y que desde entonces decidió echarle jeta a los asuntos de Cupido o de picor entrepiernero. Él defendía su caso, quería perpetuarse, incluso abrir sus compuertas o piernas a nuevas animadas a la causa. Era difícil dar crédito a su historia, pero mostró pruebas y parecía seguro de sí mismo. A todo esto diré que aquél no era un chico cañón sino todo lo contrario. ¿Comprensible? No, surrealista. O un nuevo ejercicio de realidad por encima de la ficción.
Para mí es algo que se me escapa un poco a mis entendederas amorosas. Quizá porque siempre fui un iluso del amor romántico. Del para toda la vida. Hasta que llegaron los fantasmas que me rompieron mi sueño. Pero ni con esas caí en el proceder alocado y de suma de más y más al mismo tiempo. Aunque entiendo que hay estructuras sociales y de vida que han perpetuado este modelo de dotarse de alrededores en suma. Irá con la mentalidad, que no la tolerancia, porque a veces hay realidades que se nos escapan.

Y tú, poligamia ¿sí o no? Apueste por una. Por dos. O por más.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola .. aqui SeS dando su opinión sobre dicho tema :D pienso que cada uno es libre de hacer lo que quiera siempre y cuando no haga daño a nadie y todas las partes estén de acuedo, es decir, si las novias del chico saben todo y no muestran su desacuerdo al respecto .. me parece bien. Cosa distinta sería si ellas no tienen toda la información y el chico se dedica a jugar con los sentimientos de la gente.

Esa es mi opinión, aunque yo creo en el amor único y verdadero, eso quiere decir que si estoy con un chico no veo necesidad ninguna de tener a más parejas .. todo tu cariño y amor se lo doy a esa persona.

Abrazossss y espero que esta vez salga mi comentario q es la tercera vez que escribo :D

Firmado: SeS

Anónimo dijo...

El caso es que a la vice le ha salido el tiro por la culata con este hombre, que sino recuerdo mal, paga a un euro y medio el saco de semillas que las pobre rellenan para su empresa ¿solidaria?. Y todo esto habiendo abandonado su tierra española para asentarse en mitad de la nada. Si ya sabía yo que había gato encerrado... jajajaja!! En fins... que me parece muy mal que lo estén ensalzando por dar curro a unas pobre africanas y luego se lleven las manos a la cabeza porque está casado con más de una. Que si es polígamo con consentimiento de las esposas, bravo. Para el resto, es@s de doble vida, mi total rechazo. Besitos gaditanos