lunes, diciembre 28, 2009

La Fama a cuestas...

Debemos mucho al nuevo milenio. Desde los dosmiles tenemos adelantos inimaginables tiempos pasados, hemos desarrollado capacidades de conocimiento e investigación insólitas, pero todo lo bueno suma contrapartidas negativas. Y si siempre hubo afanes peligrosos, en la última década la búsqueda incansable de la fama en todas sus vertientes ha sido una máxima para muchos. Los mismos que confían en la nada como prioridad. Todo sea hacer nada, caminos enrosetados, facilidades todas, dinero llovioso y demás sin esfuerzos conocidos. Puede que lo entendamos pero no pueden aspirar a que todos seamos patrones igualitarios. Quizá algunos queramos llegar a algo en ídem, por qué no, pero de ahí a 'tirarse' por la ruta más fácil no debe ser argumento común. Porque siempre debemos considerar el respeto como base y asimilar que un mismo objetivo puede tener líneas de actuación bien diferenciadas.

Sabemos que hay famas y famas. La consideración profesional precisamente por el desempeño de una labor concreta es anhelada por cuantos creen en lo que hacen y no encuentran un techo personal en el desarrollo de sus quéhaceres. Otros buscan con avidez ser considerados por deméritos cuestionables, ejercicios kamasútricos, ventas indiscrimadas o mamarrachadas surrealistas. Es todo un ejército, bien asumido y armado ante la feroz competencia. La misma que rebaja los niveles y anticipa que los futuros serán más detestables que el presente peripatético.

Claro que todos queremos vivir bien. O mejor. Pero se supone que algo debe ser el pilar de ese pretendido bienestar. A muchos se les olvida y quieren dar los pasos de gigante para alcanzar esa meta para los restos y saberse liberados del esfuerzo. Puede que algunos lo consigan a costa de sus escrúpulos, pero imagino que antes o después cuestionarán tales fines. O me temo que siempre tendrán que llevar a cuestas su carga famosíl...

jueves, diciembre 24, 2009

Felices Fiestas... o Siestas

Navidad, Navidad... ¿dulce? Navidad. Cada cual sabrá a qué le sabe. A mi poca dulzura me inspira, sinceramente. En los últimos años estas fechas me acumulan malos recuerdos, pero sí un espíritu de superación que me anima a seguir mirando hacia delante. Por mucho que, ahora mismo, tenga un ojo en stand by... Lo bueno es que ahora es tiempo de balancear la vida y las personas. Sacar conclusiones, plantear propósitos, lanzar tientos, pedir por si cae algo del cielo... Hay que saber emocionarse y dejarnos de los sentimientos. En especial con los nuestros, con los que a través de simples gestos o miradas entendemos a la perfección qué nos une. Aquellos que sigan pegados a su frivolidad vacía sabrán algún día qué se pierden.

Así que estas fechas pasarán pero el poso que nos generan no, permanecerá para seguir el camino sabiendo las condiciones y los cromos humanos que habitan nuestro álbum. Es el modo de integrar las decepciones y gozar las sorpresas que tantos días con nueve en el calendario nos han dejado. Así que sólo me queda desear felices fiestas, siestas o sueños. Todo sea por crecer. Juntos o revueltos. Pero nosotros. Los otros, chau, chau...

domingo, diciembre 13, 2009

Paripés en suma

No es un juego interactivo de petición masiva esta Navidad, ni un plato de nueva cocina con que vaciar el estómago, sólo el reflejo de cómo nuestra realidad se va poblando de historias y personas de dudoso gusto y veracidad para regocijo de quienes asistimos a su ceremonia de la confusión. Está claro a estas alturas que la verdad no vende, por eso muchos se afaman en autoconstruirse y, lo que es peor, sumar adeptos y elaborar un conjunto que se cae por su propio peso. Relaciones que son sin serlo, otras que no lo son y lo parecen patéticamente por la necesidad imperiosa de gustar y dar que hablar, ejercicios de divismo colectivo entre bociferios y pataletas para destacar entre la decoración, calladas por respuesta para mantener halos de misterio malamente gestionados, sonrisas de todo a un céntimo para cumplir vagamente, amistades de conveniencia y tontería subida... Parece la historia de siempre y puede que lo sea...

Lo que está claro es que haciendo cálculos este panorama invita a apearse y seguir otra ruta menos peligrosa y contagiosa. Porque sin querer el efecto rebote se da y puedes salir peor parado que los dueños de su propio paripé. Toca la conversión antisocial, una limpia de contactos y emociones. Sólo así se puede evitar no entrar en filas del ejército de la mentira integrada. Que no, que no... Los parias para quien los quiera.

lunes, noviembre 30, 2009

No soy así

Hay que chocarse con realidades ajenas para autoreafirmarse con brío. Es lo que me ha pasado estos días. Por circunstancias me vi rodeado de personalidades, ambiciones, intereses y trepajes varios. Todo en la cocktelera ha servido para saber quién soy al cien por cien. Sin duda, para muchos marciano o bobalicón. Pero soy yo. Es triste presenciar ceremoniales de surrealismo, de ambición subida, de tristeza movida por la carne magra, de tontería supina y frivolidad tatuada a fuego. No lo quise nunca y menos ahora. La madurez llega, lo sé. A veces cual losa. Pero en momentos así sirve para valorar el estado de las cosas y de las personas. En esta etapa sé con qué cartas juego en mi baraja, que las palabras se las lleva el tiempo y la memoria desmemoriada, que las intenciones pueden ser crueles por muy angelicales que aparenten. Que no es oro ni platino todo lo que reluce. Ahí es donde nos luce el pelo sin implantes y precisamente debemos darnos nuestro lugar, con coherencia y autenticidad. Yo creo que lo he logrado. Pese a tiempos de males y oscuridades, con tesón y ganas la reconstrucción ha sido posible. Siempre con los valores inamovibles, con las intenciones en bondad por bandera, con las ganas como patrimonio.

Rodeado de cutre famososos, de aspirantes a brillos y ceñidos varios, de dictadores de la información desinformada, de culos inquietos por hallarse en suma, de vagos y maleantes, de ególatras intrigosos, de capos de la mafia pestilente... Nadie me hizo perder ni un estribo. Allá cada cual con sus límites y bajas pasiones. Es todo tan de mentira que los efectos son tremebundos. Es triste que el mundo gire con tanto residuo suelto, tanta falsedad regalada, tanta venta consentida. Ver para creer. Creer en uno mismo. Y descreer de otros.

Soy lo que soy. Con más o con menos, pero asentado en la realidad. Con las heridas del tiempo y los bárbaros más crueles. Ahora más reafirmado y consciente. ¿Quién eres tú?

domingo, noviembre 22, 2009

Volare, relajare

¡Qué necesidad! La del mundo y la mía. En nada vuelo más allá y me impulsan las ganas de encontrar sosiego, de desconectar realmente, de dejarme llevar por buenas compañías, por perderme entre palabras, por sentir que aún puedo contar y sentir cosas, por ver para alegrarme la vista... Todo con tal de no dar por hecho que mi mundo es sostenible sine die. Agotando cada momento, siendo soy. ¡A volar tocan!

martes, noviembre 17, 2009

Paraíso muscular

Es curioso como los dictados de lo frívolo nos imponen una imagen precisamente imponente. Lo que supone unos esfuerzos y gastos extra para conseguir el efecto boca/abierta en los otros, deseosos de cuerpos de catálogo con los que cabalgar a las montañas del deseo infinito. Así las cosas muchos se suman a la cruzada de reinventarse para exprimir sus potencialidades musculizantes o corpóreas y conseguir un resultado óptimo. Lo cual no siempre es fácil, porque el exceso se da y la grima puede entrar en acción... Mientras otros nos dejamos de la vida y el amor, nos preocupamos por las cosas del día a día y no jugamos a la construcción masiva para depositar las esperanzas de conquista en la arquitectura vía mancuernas. Por mucho que la envidia poco sana enfrente a los dos bandos.

Pero lo bueno es estar en uno y disfrutar de las bondades del otro. Ecuación que no siempre gana. En mi caso sí. Estos días tuve ocasión de acompañar a los Kens de Cantabria en su cruzada por el guapismo del terruño. Y al estar con ellos, al calcular sus índices de no masa corporal, al darles a entender que el aceite no es necesario para ser grandilocentes (sobra con el que otros muchos pierden) o que el compañerismo debe estar por encima de todas las zorras y viceversa... me entendí más a mi mismo. Fue gratificante compartir tantos momentos con gente con ganas, inocente en muchos casos, de vueltas en otros, sensibles o crecidos, pero siempre ellos. Muy de verdad. Algo tan insólito en estos tiempos. Les echaré de menos.

domingo, noviembre 08, 2009

Uno más uno igual a cero

¡Qué injusta es la vida! A veces nos posiciona ante personas en el momento menos adecuado. Y lo que es peor, nos toca el papel de público de un circo muy cuestionable. Porque es común darse contra la pared de parejas discordantes donde uno pide a gritos un rescate con recompensa. Pero no es fácil entrar en una ecuación de terceros, se puede salir escaldado y rebanado. Así que toca esperar entre desesperos y desvelos. Dejar que actúe el destino con sus grandezas y miserias y procurar no atentar contra los sentimientos.

Bien es cierto que es mejor la soledad mal entendida pero bien vivida que el arrastre sin remedio por alguien de dudosa respuesta y latido recíproco. Así que toca seguir vagando por el mundo pseudoamoroso porque el tren lleva retraso. Mientras seguiré con mis sumas hasta que el máximo común denominador pida protagonismo. Hasta entonces quién quiere calculadora, bastan las manos y las cuentas de la abuela.

viernes, octubre 30, 2009

El vigor surrealista

Sobrepasado me hallo de tantas situaciones, exigencias, compromisos, tonterías varias, deseos por explorar y explotar... Un cúmulo muy extraño que me hace ser y del que quisiera desprenderme. Pero parece complicado. Aunque de aquí a nada quiero cerrar el chiringuito de la rutina y hacerme con unas semanas de propiedad exclusiva para retozar a antojo, aunque sea en soledad. Aún así queda para ese momento y hasta entonces y/o ahora la suma de surrealismo ha seguido marcando mi agenda. Un viaje exprés a la capital reinante sirvió para ejercer de reencuentros, para vivir la tontería ajena y para sustituir las ausencias con compras excelsas. Nada nuevo. Aunque reconozco que nunca dejaré de sorprenderme de cómo tantos se construyen con pichiglás sus vidas vacías para granjear unas apariencias chistosas. Hay quien gusta de los fantasmas, pero teme las calabazas. Mal dadas les vendrán.

Y lo peor es que queda mucho por soportar malas caras, peores sentimientos y deseos. Por mucho que acabe el año y toque hacer reflexión en positivo, con semejante panorama y pobladores, malo, malito, malo. Hay que esquivar cada día la hipocresía barata, las palabras vacías de contenido, las miradas de hielo, los cuchillos que dan trabajo al viejo afilador... Toda herramienta es poca para los cómplices del lado oscuro, empeñados en ensombrecer la luz que apunta al fondo. Pero si algo nos ha enseñado Holywood es que, al final, siempre ganan los buenos. Habrá que creerlo. Ya que en el amor sus ideales son de plastilina y nadie nos moldea. Jur, jur.

domingo, octubre 18, 2009

A expuertas

Hay crisis y críticos. Luego ya están las personas inmersas en su propia maldad, buceando entre sus miserias y tratando de no derramar su putrefacción a los restos. Los pocos ejercicios de vida social que me facilita mi laboriosidad demuestran la necesidad de muchos de sacar la cabeza (léase el término en su variedad) social sin morir en el intento. De ahí que las poses, medias verdades, caras peripatéticas, arrugas con disimulo, hipocresías de corrillo, miradas atronadoras... sean un ejercicio constante de desfachatez pública. Esa inverosimilitud del que no es nadie se lo crea y pavonee inmisericorde, con regodeos y fanfarronería, es una constante. Y por mucho que prometan sus ausencias, regalan sus sobreactuaciones.

Está eso frente a la persona que en realidad tiene motivos sobrados para sobrarse pero que actúa con una naturalidad pasmosa. Incluso excesiva. Dando paso a las dudas, a cuestionar si tal proceder no será motivo de estudio para calar a bien entre las gentes, ávidas por alzar a nuevos ídolos, pero celosas de los minutos de gloria perdida.

Hallado allí cuestiono todo. Mi presencia, mi futuro... No entiendo cómo gustan de la necesidad de contextos y escenarios de dobleces. Prefiero la llanura de lo cotidiano que la concesión a lo magnífico. En caso de darse tal cosa. Si voy es por el puro compromiso y valoro mucho el poder extraer ideas así para no caer en el fango del surrealismo hipócrita. Y las pajaritas de quita y pon.

domingo, octubre 11, 2009

Descontexto nocturno

Y descontento. Nada que ver con las compañías ni los motivos, pues no he de quejarme -sería injusto- de la mayoría de mis rodeantes y los momentos de juntura, tales como años en suma, desfases prenupciales o visitas heróicas. Pero siempre me toca el regodeo a mi desconexión con el hecho nocturno. Tiempo atrás supe que no era un fagocitador de las noches en vela o a la luz de las luces espasmódicas de garitos inmundos. Aunque no imaginaba que tan temprano sintiera esas ganas irrefrenables de abandonar por siempre jamás los contextos lunáticos, por su escasa aportación a mis niveles de satisfacción. Sigo privilegiando otros escenarios más íntimos y tranquilizantes, frente al desparrarme desenfrenético de quienes zigzagean por las calles en busca de alimentos cárnicos exprés.

Todo esto tiene muy mala prensa y comprensión. Pero llego al punto de no influencia ajena. Bastantes efectos tuvo eso en el pasado, como para a estas alturas de partido vital mantener la dependencia al juicio exterior. Puede que inquiete, lo reconozco, esta vena tan poco social y raruna frente a los restos, pero si no fuera yo quien me asuma mal asunto. Por eso entiendo que el salir y acabar con una cara directamente proporcional al aburrimiento supino, es fiel reflejo de mi carácter único e intransferible. Nunca quise ser uno más ni reír las mismas gracias ni practicar las mismas tácticas para sí (mi-me-conmigo).

Y así me encuentro, desvalorizando las noches. Vaciando de sentidos las horas en cúmulo que suponen poco o nada. Intentando encontrar otros motivos de relleno vital. Aunque sea una utopía evidente. Seguiremos desinformando...

domingo, octubre 04, 2009

PaquiSuperStar, esa gran conocida...

Tengo el placer de compartir la historia de una gran mujer. Trufada de éxitos, única como pocas y feliz de compartir con tantos que en un plazo breve de tiempo se convertirá en señora de... por mucho que sea una estrella del firmamento teen. Con todos ustedes PaquiSuperStar. Ésta es su historia... Sean indulgentes...

‘VIDA Y MILAGROS’


- Esta joven bilbaína destacó como solista de iglesia con éxitos como ‘Señor, rezo de noche; Señor, rezo de día; ¡Qué alegría!’.

- Un día, entre cánticos y por casualidad, fue descubierta por un cazatalentos y productor musical, conocido como ‘el Dandy’, que en su día llevó a la cima del éxito a ídolos como ‘Melody Politono’ y ‘Raulito, él solito’.

- Su primer disco, ‘Yo soy Paqui’, barrió en ventas y fue número uno de los ’40 Primordiales’, incluso llegó a ser disco de platino plus ultra…

- En la actualidad triunfa ‘Paqui, Paqui, Paqui’, primer single de su nuevo y flamante disco ‘Absolutamente Paqui’.

- Tras el inicio musical fue fichada por los estudios ‘teen’ y así comenzó su carrera de cine. su primera película fue un reto que incluía una doble interpretación: ‘Tú a Santutxu y yo a Indautxu’.

- En su filmografía destacan otros filmes como ‘Buscando a Paqui desesperadamente’, ‘Paqui en Marbella’ o ‘Paqui, todo glamour’…

- Ha sido portada de las revistas más importantes como ‘Super truper pop’, ‘Loka de remate’, ‘Bravo tú’, ‘Hola, ¿qué tal?’, ‘¡Qué me cuentas!’…

- Tras hacer pública su virginidad se supo de su adhesión a ‘Virgencitas no anónimas’, un grupo que defiende la castidad de las superestrellas. Lleva un aro identificativo.

- Tiene grandes lotes de merchandaising que ella y sus amigas ‘Cuqui Total’, ‘Esmeralda Luna’ y ‘Petunia Intensa’ diseñan en sus ratos libres.

- Pese a su carácter internacional es muy de su tierra. de hecho, le han dedicado una rotonda, lo que le ha inspirado para escribir su primer libro: ‘La rotonda del éxito’.

Estén atentos a sus pantallas, revistas y demás... Estamos ante una estrella que promete no abandonarnos cual desodorante... ¡Suerte Paqui! Y que 'seas feliz en tu matrimonio'...

martes, septiembre 15, 2009

y van 200...

Los que pude escribir, los que se quedaron en el cajón virtual, los que no me atreví a compartir ni teclear, los que fueron del pasado, los que vendrán o soñaré... Son tantos los contextos vividos y por ídem... Lo bueno de todo es que el soporte se mantiene y hasta lo aguanta todo. Los malos ratos, las diversiones bloggeadas, las iras contra el mundo y el desamor, los castillos en el aire... Por mucho que me enrrede sobre mis palabras, que verborree raramente, que haga piruetas escribanas y me salte las reglas de la comprensión, siempre buscaré este rincón para dejarme llevar por las palabras. Ser yo mismo con mi mecanismo, en estado puro emocional y vivencial. Es el verdadero sentido de todo esto. No sólo por el compartir, que también, sino por el extraer la esencia de tantas cosas o momentos del interior intrínseco y plasmarlos en contexto.

Ayer, compartiendo momentazo y palabras con Boris Izaguirre, comprendí que lo mío siempre serán las palabras. En una u otra forma. En uno u otro medio. Él ha sabido hacerse a sí mismo y aspiro algún día a tener su coherencia y caminar creativo. Sus ojos son muy de verdad y demuestra ser un artista del saber estar, del saber posar...

Ahora que empiezo nueva etapa, que se presuponen nuevos bríos y ganas que no llegan, me planteo muchas cosas. Quizá demasiadas. De los sitios, las gentes, las expectativas... Quisiera remontar el vuelo e incluso empezar de cero. Quitarme tantas capas y capear el temporal, hacer frente a los nubarrones turbios y peripatéticos. Volvamos a confiar en el susodicho tiempo, gran protagonista de 200 e imagino que otros tantos. Contextos.

jueves, septiembre 10, 2009

Amablamente

Así pasamos por el mundo. Ejerciendo de amablas de lo nuestro, tratando de sortear los obstáculos y hasta trepas, todo sea por el bien final... Pero a vueltas con el camino nunca nadie dijo que fuera fácil, menos su pasear... En fin. Pasan los días y la vuelta a algo más que el cole complica todo. Con cambios innecesarios pero poco gratuitos toca padecer nuevas realidades, seguir soportando rostros de vómito precoz y poner buena cara ante la crisis. Tócate lo que te plazca...

Siempre queda lo bueno. El cariño espontáneo, una idea que promete, unas palabras que ayudan a respirar, una mirada que corta la respiración... Menos da una piedra. Aunque tampoco hay que dejarse llevar por el conformismo y menos por la necesidad, esa palabra tan grande que pesa tanto. Por eso hay que sacar pecho (aunque no operado) y levantar los ojos al mundo de lo nuestro, lo que nos hace mejores, lo que nos enseña... Así es como el crecer es un hecho.

Parezco Mister Profundo, y eso que no tengo banda ni fachas bellezonas, pero es lo que me pide el folio en blanco. Revolverme en situaciones, contextos y visiones que me conforman cual escéptico de lo vital. Ojalá llegue el momento del cambio, el hombre de mi vida y el quéhacer de mis sueños. Entonces cambiaré de discurso, me volveré flower power y escribiré sin retorcimientos. Hasta entonces seré yo. O casi.

domingo, agosto 30, 2009

Hay un (sub)mundo fuera

Entregado al contraste me siento contrastado con un mundo sin entendimiento. Sólo quiero que apearme, huir lejos, practicar la escapada y no volver a esta realidad que desaconsejo. La pereza de los otros me vence, su frivolidad me sobrepasa y las ganas de borrar suben cual espuma cervecera. Es difícil voltear una vida, unas gentes y unos ánimos. El panorama, tornado desolador, impide que la lucha tenga sentido. Ya no. Han sido tantas las guerras, tantos los soldados víctimas de sí mismos, tantas las heridas aún sangrantes, que el todo es tremendista o más.

Me volveré asocial, ejercitaré el enclaustramiento con sentidos, los que otros no ponen en práctica(s) dejados de la mano de Dior, presos de su tontería maquillada. No quiero caer en esa inercia de lo surreal, en lo fácil como medio de supervivencia. Siempre quise ir más allá, ser diferente concienciado y titulado. Sin regalos ni de oídos ni para despapelar.

Puede que el tiempo me recoloque. Tampoco es que quiera un retardo, ni mucho menos. Pero si tomar distancia para encontrarme y saber que esta vida hay que vivirla si los motivos no son baldíos. Si los entornos no son vacíos. Si las palabras tienen contenidos. De otro modo, ¿quién quiere este mundo? Renuncio al mío.

domingo, agosto 23, 2009

Señor, no, señor

Nunca di mucha importancia a la edad en sí, ni al paso del tiempo. Es más, me cansaré de repetir esa idea peregrina de avanzar en dígitos que creo sería un buen remedio para mis males. Casi pasar de adolescente descreído a adulto de maduración eficaz. Pero, de pronto, una palabra ha sido disparada contra mi persona como una bala de destrucción masiva. SEÑOR. Con sus cinco letras, con su ñ intercalada tan patria. Y sí, lo reconozco, me ha sentado como un jarro de agua fría. Por mucho que brotara del cariño, de la cercanía, de la empatía... me resultó un gesto feo. Quizá mi look barboso, tan comentado, dé lugar a equívocos añejos, pero de ahí a verme tal y como un señor... Para qué tantos Custos, Desiguales y demás colorismos teen.

Claro que casi prefiero el señorío que las malas comparaciones. O las ciertamente odiosas. Que un chulazo de categoría ducal me vea como un presentador de televisión de otra época, en su día pegado a una calabaza de audiencia millonaria... Es tremendo; congelante. Ni sus proposiciones espasmódicas ni su cara de ángel lograron despertarme del shock. Creo que tendrá que pagarme el psicólogo o remediar como mejor pueda el desatino... Como el mío de peatón pegado a un despiste y pagando por multa. Y es que como una bilbainada más, me tocará pasar por caja al saltarme el rojo semáforo de una calle atestada. No tuve sugestión con el armado policía, su porra tenía otro destino para mí. Y con su bordería inusitada, multazo al canto por incitar a otras a pasar el cebrismo al margen de la ley... Verídico.

Y con todo, los días pasan y el calor bochornante no arrecia. Qué ganas de grises intensos y rincones compartidos más íntimamente. El bullicio debe acabar y tanto exceso quedar en el cajón de los buenos recuerdos.

domingo, agosto 09, 2009

Pies, ¡a tierra!

Necesidad de apertura frontal de ojos sin ojeras a la voz de ya. Y es que el rodeo de quienes lo son en maldad se multiplica. Decían los sabios que cada cual habla y piensa en sí, dejando a los restos en la cuneta haciendo dedo. Una práctica abocada al fracaso en los inocentes, cabezas bienpensantes y confiados en la bondad de los conocidos. Que no, el burro debió ser apeado tiempo atrás, cuando el cúmulo de detalles patéticos dejaban un panorama complicado. Siempre quise ser optimista hacia los aledaños, con las gentes y sus intenciones, pero debo quitarme de una vez por todas la venda. Los cariños se conquistan pero se salpican de egocentrismos y egoismos inquinados. Ahí entra el drama del tú a tú, cuando la parte y la contra-idem saben lo que hay pero el velo del silencio y el bienquedismo vence por no generar un cisma. Tremendo. El nuevo curso deparará sorpresas y voladuras por los aires que un ser superior sabe qué...

El panorama no florece en otros campos, los del latido cardiaco. Porque hay quien demuestra la indiferencia más insólita ante el propio abandono. No toleraré más que mi corazón sufra por indeseables ególatras, aprovechados a su causa y tontuneros que bailan el agua por interés y con bajeza. Apíadate tiempo y demuestra a cada quien el equívoco de su empeño en parecer fuertes y no reconocer la necesidad de la cercanía, de la palabra, el gesto cómplice... Perdidos en su nube banal y frívola quizá despierten y valoren esa entrega absoluta y gratuita que ahora parecen olvidar.

Bienvenido y bienhallado en la tierra firme. Puede que aquí empiece a quererme, a decir NO y a recolocar el mapa de cromos humanos. Y es que hay tanto cromo para cambiar... ¿Quién da la vez?

domingo, agosto 02, 2009

Triste inquina

Miedo, susto, pavor, congoja, rabia, indignación, vergüenza, pena... No están todos los que son, pero son todos los que están, los sentimientos que acumulo al asistir a la ceremonia de descrédito que algunos intolerantes tratan de hacer frente a la felicidad ajena. Fue por una campaña concreta de un medio de comunición insólito, obcecado en tirar por tierra aquello que 'supuestamente' les incomoda. Cuánta hipocresía concentrada... La anécdota no es más que la piedra de una montaña de surrealismos personificados, esos mismos que se empeñan en hundir al que va por su camino. Duele saber que otros sí que viven de cara. La espalda la dan al sol que les calienta cuando los otros lo hacen por su moralidad difusa.

No logro entender qué lleva a tantos a zancadillear al resto, a fijar su maldad concentrada por su frustración egocéntrica contra los que tratan de avanzar sin mirar atrás. Se ceban en entorpecer el bienestar corrompiendo el estado de las cosas. Malmetiendo en sociedad tratan de abrir zanjas para dañar a diestro y siniestro. No les importa dejar víctimas ni manipular conciencias, lo suyo es el lado oscuro.

Creo que es tiempo por redundante que sea de desenmascar a tantos. De no permitir que hagan de las suyas con tanta desfachatez y amparados en la nada, sólo en la gana supina de fastidiar por fastidiar. Que se creen un muro y se hacinen todos en odio y ruina. No podemos dejar que nos enturbien los días, que bastante inestable es el tiempo como para que ejerzan fenónemos atmosféricos indeseables. Lamentables, a vuestras cosas...

jueves, julio 30, 2009

Si Falete existe, todo es posible

Hay verdades de perogrullo que nacen de lo espontáneo. Y como seres en recolección no podemos dejar pasar por alto... Y justo en una constante de noches de fiesta (sin José Luis Moreno), de prácticas en positivo del ya famoso 'los amigos de mis amigos son mis amigos', de bebidas de subida venosa exprés, de caseteo hipercalórico, de bailes con la luna muy amabla de testiga, de surrealismos varios y salidismos de pico de plancha... Así se hace grande el entendimiento de Falete como base de lo irónico de la vida. Él y sus estilismos insuperables (enorme, tal cual sí, su modelo palabra de honor caserito en fucsia florido) hacen que la vida cobre más sentido frente a quienes nos desdibujan las sonrisas por su inconstancia, insinceridad, intolerancia y demás 'ines' poco fashion.

Más allá de la coña falética, comparto que es tremendo abrir los ojos y ver una realidad dolorosa de quien esperas tanto. El tiempo, ese gran amigo (también para la industria cosmética) da pie a entender que no todo el mundo estamos cortados por el mismo patrón. Algo entendible de base, pero no cuando se sientan las bases redundantes de una amistad / relación con unas reglas que uno se salta a la torera, pasando de las consecuencias. Cómo si sentir fuera un capricho. Que no, que no... Ojalá que ese mismo tiempo les haga darse cuenta de lo que pierden. En ausencia todo se valora más, ¿cierto?

Pena más la de aquellos que viven sin vivir, encerrados en su mentira, apolillados tristemente parapetados por el miedo a ser felices. Puede que algún día se entiendan a sí mismos, dándonse la oportunidad de querer sin patrones, sólo con el impulso del latido feliz. Se lo merecen. No así su engaño doloroso y cruel, de oscuridades enquistadas y patetismos temerarios. Quienes tanto lucharon por reivindicarse y hacer camino común gritarían más aún hoy, en vista de tanta letanía de inseguridades y angustias neandertales.

Y lamento (que no boliviano) por los compañeros mediáticos de pronto se ven en la calle. Los empresarios, desde la atalaya de sus euros en suma, no tienen en cuenta que no hay números sino personas. Y futuros. Seguro que van a escribir nuevas páginas de vida profesional y personal de éxito. No se espera menos. Y desesperar tampoco es la solución. Porque 'Si Falete existe, todo es posible'.

sábado, julio 25, 2009

Preposiciones

Por mucha preposición que me hagan, nada tiene que ver con a, ante, bajo... La vida tiene estas cosas surrealistas con las que te vas topando. Incluso con reacciones, palabras, gestos, giros y demases que te dejan un poco en shock. Qué hacer ante tales, pues seguir el paso en firme. Más cuando, pese a todo, parece que el camino está despejado. Y es que, cuando por una vez te das la opción de pasarlo bien, con pocas comeduras de tarro (en ausencia de otras), que quieran nublar tu realidad me parece de bochorno. Así que limpia, limpia y algo queda. Seguro. Por más que en suma haya quien siga demostrando su nulidad, su maldad intrínseca como seres poco dados al resto. Cuesta esperar tanto de un alguien y no recibir nada. La cantinela de siempre. Pues ea, arrea.

Entiendo que el disfrute es una liberación. El liberarse de comentarios, de clichés, el dejar volar frases, impulsos, ganas de gigante... Por mucho que topen con muros y caras raras, hay que reír para construir. Es así como en bonanza los restos ven en ti esa especialidad que tanto deseas proyectar. Te pertenece, te habita, pero cuesta sacarla al escaparate. Y no nos engañemos, vivimos en exposición y ahora en periodo de Rebajas por los restos (de almacén). La crisis tiene unas garras contra las que luchar se antoja difícil.

Y en todo el panorama, las divas brillan más, las compras lucen menos, los guapos se aceitean, las copas no chispean, el amor está en el aire y la duda en el tejado.

miércoles, julio 15, 2009

Navegantes

Vivimos sin previoaviso tantas cosas y personas. Somos en comunión, con o sin pecado concebido, pero somos y seguimos nuestro tránsito de la mejor manera posible. Y ante eso, la vida se complica para quienes huyen de las complicaciones. Se muestra injusta y esquiva, da bandazos y tropelías a seres que reciben el mal con una sonrisa de oreja a oreja. Son héroes de lo cotidiano, que saben lo que es levantarse una tras otra. Sin perder su compostura y sabiendo que el futuro es suyo. Mientras, otros, los más quejosos seguimos en nuestro ceremonial de confusión, de medias verdades, de deseos ocultos, de gritos silentes. Se hace tan cuesta arriba una situación así. El desequilibrio como máxima, la caída como final.

Pasan los días y la vida. Pesan los años, las canas por muy teñidas. Las arrugas piden paso que ni cremas radiantes y de oropel mitigan. Todo es una farsa, la de aparentar que, siendo menos. Y así los cálculos no son matemáticos, más bien patéticos. Como tantos de los que esperas y sólo recibes ausencias, noes y giros de cabeza. El fiarse se va acabar, las manchas quedan en el corazón más que en las tazas de cafés robados. Porque hay ladrones sin guante donde menos lo esperas. Los mismos que pueden causar un desespero grande o más. Una historia de no acabar, dada la tontunería e inocencia inacabada que vino para quedarse. Aunque esperemos que no hasta los restos y sí conozca fin.

Pero si esto tiene sentido es por la propia navegación. En el barco que nos conduce tenemos obligación de remo infinito. Lo de ir de señoritos a mesa puesta quedó atrás o en utopía a esos que se eligen para caer en aguas profundas. Aunque no es cuestión de incidir en esas profundidades luctuosas, preferible es quedarse en la brazada decidida de los que dan todo a cambio de nada. Nada que ver con otros que esperan y esperan, chupópteros sin remedio que se arrinconan y esperan la oportunidad de la caza en debilidad. No merecen ni letras ni lamentos. Sí lamento que haya quien se vea en el disparadero con infortunio. Ojalá que el tiempo levante tempestades y coloque según corresponda. Haría tanto bien. La mar espera. Y no en calma.

viernes, julio 10, 2009

Electo por defecto

Contra el poder de las elecciones insólitas, espontáneas, imprevistas y sentidas poco se puede hacer. Porque cuando manda el corazón la cabeza se aparta y el efecto de zumbido se distorsiona para mal. Y así el resultado final es de desquicie incontrolado, de escape necesario, de palabras tragaderas, de odios inusitados, de rabias piramidales. Todo porque el momento no se selecciona tampoco, toca y se sufre. Mamón.

A vueltas con el corazón entiritado, está claro que nadie decide el quién de su vida. En realidad una suma de circunstancias y características en riada dan como resultado un acercamiento a la figura amorosa. La misma que puede darte refugio en su cueva, que aletargarse o dejarse llevar por otros especímenes de manada, con ansias y necesidades bravuconas y temerarias. Así es como desde el otro lado de la realidad de latido infeliz asistes al ceremonial del otro contigo. O con los demás. Es duro el desubicarse cuando los extraños se apropian de ese ser que quieres en pertenencia. Pero no todo se puede verbalizar, ni poner el punto en i a tiempo. Así que puede acabar siendo tarde y las consecuencias duras de pagar. Tanto que ni la tarjeta platino resiste el mal mayor. Ahí, claramente, la elección es de fiasco absoluto.

No sólo se da el mal electo entre corazones por corazonear. Lo mismo sucede con los llamados amigos, término plural que se pluraliza frívolamente, como en una necesidad de tener cromos de colección. Cuantos más y más codiciados, mejor. Pero, otra vez (¡qué raro!) erramos al apropiarnos en entornos de otros indeseables, de pasabaporallí y mequedéparasiempre, en realidad personas que poco aportan pero mucho aprietan. Las que arrastramos cual lastre en sí mismo, todo sea por el bien social. Son los cuales hacen de la puñalada trapera su especialidad. Del chismorreo a destiempo su deporte favorito. De la tontainada su leif motiv. No puede ser. Se pegan cual tejido adiposo y ni la mejor dieta ni la máquina antikilocalorías más potente consiguen su disolución.

Se hace necesario pues el ver más allá de lo que pasa, cual infrarrojo futurible. Porque de otro modo seguiremos entre quesos dados para mal por seres que no nos convienen y que con tan malas artes se regodean en el sufrimiento de un tonto iluso que aún espera de la vida. Y de los vivos.

martes, julio 07, 2009

Exceso virtuoso

Los efectos de una semana orgullosa no siempre son buenos. El más es más se cuela en las entrañas y supone un choque complicado en el retorno de la realidad obtusa. Pese a todo, toca quedarse con el recuerdo de lo que fue y las ganas de lo que vendrá. Valorar que ahí fuera hay todo un universo de posibilidades y gentes que en suma pueden acabar con nuestro hastío. Y es que se hace muy necesario el romper la barrera y pulular entre seres de lo anónimo que dan vida a la noche como estrellas fugaces. En cameos de lo divino y de lo humano que al final dan sentido al todo. Gracias a esos pequeños momentos vale más que la pena el desvelo que supone en sí una fiesta de contraste, de cuerpos desatados, de desátames en grito, de venas anabolizadas, de tacones andamiados, de rímeles deconstruidos, de dudosos en busca de su verdad, de vicios sacados a paseo...

No me olvido de los reencuentros, de las risas espontáneas, de las sorpresas gratas y dulcificantes, del futuro por escribir, de los sueños que compartir y de las carrozas de las que liberarse, porque no todo debe ser el exceso en sí, la base es lo más importante, con la reivindicación por bandera. Arcoiris, cómo no.

jueves, julio 02, 2009

Categóricos

Una manifestación merece la ruindad y frivolidad que muchos abanderan. No caeré en el cinismo de negar la importancia del físico, diría más que de la mera atracción física como medio a plantear una historia / historieta / cuento de una noche de verano, pero el tema del olimpo de los dioses que se creen superiores me supera en redundancia. Eso de ningunear al resto (que no integran su clan anaboliante o derivados) y mirar por encima de sus hombros esculpidos me parece un desprecio hacia ellos mismos. No entienden que la belleza primeramente es subjetiva y después es relativa y temporal.

Quizá con la distancia que da el tiempo, las personas que pasan por nuestras vidas y las reflexiones que brotan por sí solas aprendan a valorar a los demás sin necesidad de esperar de ellos una portada de revista, un bicep estratosférico ni una virilidad kilométrica. Somos y aspiramos a ser algo más. Digo yo. Por eso sigo confiando en esos pocos que miran cómplices y te ganan en las distancias cortas. Saben teclear en el momento oportuno y del modo más encendedor, sin necesidad de vanagloriarse de su ser en demasía.

Aunque lejos de unos y otros, cuando el alma se ancla, se fija en unos ojos, unas artes, una personalidad única que todo lo tiñe de especial, es difícil hacer otro viaje y encontrar un copiloto a la altura. Porque el vuelo de la vida pide a ese que la negación impide. Aunque siempre los imposibles fueron algo más que un reto.

domingo, junio 28, 2009

Orgullo de ser

Más allá de una fecha, un sentido, un simbolismo... Las personas somos la suma de conceptos que nos hacen como tales. Hoy, en el Día del Orgullo Gay, puedo escribir con todas las letras que me siento orgulloso de ser como soy. Sin medias tintas, ni escondites ni armarios apolillados. Sé quién soy y la vida que quiero llevar. El camino no fue fácil, aunque tampoco seré un victimista, pero creo que debo valorar mis pasos y la firmeza con la que me entendí sin cuestiones. Lamento el sufrimiento ajeno, las dudas, los rencores, las medias verdades, el sí pero no de tanta gente que se agazapa en las sombras para intentar ser en libertad. Pero el peso de la oscuridad les vence. Yo pude ver la luz y el panorama no es tan desolador como se puede imaginar cuando se vive de eso, de imaginaciones.

No hay vida sencilla pero sí complicaciones que nosotros mismos nos creamos. Por eso pienso que es justo agradecer a quienes han luchado dando la cara por otros que nos hemos subido al carro de la justicia, los avances, la dignidad... Si somos y pregonamos orgullo es básicamente por esa labor de hormigas guerreras de esos pocos que hicieron (hacen) muchos. Un gracias infinito y aplausos de plas, plas... Como el recuerdo a quienes no pudieron ver ni vivir en carnes propias que hoy es menos utópico el amar por tu impulso sin que nadie te corte las alas. Merecían su respeto y se encontraron con los muros de la intolerancia y el absurdismo.

Miro atrás y me enorgullezco de la voluntad de exponer mi verdad, mi sentimiento, mis pasiones sin velos ni requiebros. Lo malo pasó y si algo queda se diluye por el apoyo decidido de quienes saben que una persona lo es al margen de su entendimiento. Para quienes me dieron y dan la mano por mi camino de baldosas amarillas hacia el arcoiris más que gracias. El Orgullo es cosa de todos. Vive y deja vivir.

martes, junio 23, 2009

Migamo

Dícese del que no es monógamo ni bígamo, ni polígamo... Más bien quien se conforma con las migas y hace con ellas un pan dramático.

Es triste pero es así. Tengo la certeza de que el tiempo sólo me reserva rastrojos de amores que me deconstruyen a pedazos un corazón de por sí maltrecho. Ni los peores augurios de una pitonisa de tres al cuarto valen para remediar la realidad azarosa de la negación. Y así sorteando los males o pseudotales intento levantar cabeza, mirar a los ojos del AMOR pero no perder los estribos cual quinceañera perdida entre su física y los fulgores de su química explosiva. Por momentos el dejarse llevar puede ser un caos mayúsculo, porque los efectos se pueden propagar y las consecuencias pagar entre muchos ceros. La noria del sentimiento es así, de baile espasmódico constante. Peligro en el ambiente, siempre.

Una cercanía a tiempo, un estar sin ídem, un complicidad que parece auténtica, un compartir y hasta planear a dúo. Un suma del querer exponencial. Así cabalgo sin ejercitar el músculo como pide a gritos. La conformidad de lo mínimo me lleva a una frustración que da al traste con las ilusiones, la fantasía y demases sueños imaginados. Los mismos que dibujan más sonrisas, que palpitan el ser entregado. Y tanta entrega no es buena. Pero, Migas a Domicilio, aquí tiene su pedido. Gracias.

jueves, junio 18, 2009

La jaula de las locas, focas, lobas y demás faunas

Qué contentos deben estar los criadores zoológicos, los domadores cual Ángel Cristo, los amantes de la masa animal... Porque asistimos a una crecida sin precedentes de las especies sorprendentes de mal empaque social. Las mismas que dicen poco de sí mismas pero demasiado de los restos. Que se afanan en crear polémicas o fangos, en sembrar dudas, en pistolear a diestro con siniestros... Su afán es el hacer daño de forma gratuita, incluso en campañas de 2x1 o más. Todo con el objetivo de crear víctimas a su paso. Valen todo tipo de comentarios desalmados, de perdigones direccionados, de falsedades enquistadas y de caras mutantes. El fin justifica sus medios y sus víctimas asisten a una ceremonia endemoniada sin saber cómo gestionar tanto ataque. En ocasiones son tan sibilinos que sus efectos / consecuencias pasan, de supuesto, desapercibidos. Pero el tiempo recoloca sus estrategias y el mal siempre vence.

Todos cometemos errores. Causamos daños, males y semejantes. Asumo que muchas veces desde la intención, profunda o superficial, pero no hacemos de ello una constante. Pero me consta que otros -léase al tiempo en femenino- sí que optan por materializar en negativo una personalidad inquisidora de zancadilla ajena. Saca lo peor de mí y me molesta que intenten vender motos o camiones ante los más ingenuos. De ellos y su necedad se aprovechan para continuar sus ejercicios de aniquile que algo queda.

Puede que mi terquedad o tontunería me haga defender al débil, o cegarme con el ser más inmerecido, pero siempre apostaré por la verdad. Por no dejarse llevar en rituales de la confusión, del engaño como base y la majadería como pilar. Que se deconstruyan a sí mismos, o rematen los rincones más oscuros de sus jaulas de oro (rancio).

lunes, junio 15, 2009

Nocheabundo

Lo confirmé tiempo atrás, pero la inercia me lleva a reválidas del surrealismo nocturno. Y es que hace ya tiempo que me dije no a las noches de jarana o derivados. Quizá una edad por adelantado, un cansancio insuflado o una desgana incorporada sean los culpables. El resultado siempre es el mismo. Por muchas buenas gentes, queridas o queribles de quienes acompañarme y desparramar a conciencia, el balance se resuelve para mal. El disfrute no hace acto de presencia, agazapado en rincones absurdos de difícil hallazgo.

Quizá lo que peor llevo siempre está en los exteriores, en las visiones ridículas de seres ídem que no alcanzo a entender cómo son capaces de sociabilizar y sacar de paseo sus miserias. Son especímenes de vida en comandita, gustosos del dejarse ver y provocar para vómito espontáneo del respetable. Sin entendederas posibles, el soportar en demasía espectáculos dantescos me resulta de lo menos sugerente. Por eso opto por el escaqueo definitivo. Lo mismo me pasa con el grado de frustración, que alcanza lo supino al no entender parejas de cuasi androides, sumas que restan y tonterías edulcoradas. Todo frente a la soledad encorsetada, del que espera entre desespero las caricias de un volátil macho cabrío.

Pero Te Espero Aquí, que lo sepas. Aunque la noche sea nuestro refugio.

viernes, junio 12, 2009

Bondad regalada, maldad revelada

El frotar se va a acabar. Y más cosas. El cansancio de ir de bueno por la vida para acabar escaldado, lo mismo también. Y es que los límites se encuentran cuando las gentes se pasan por su arco del triunfo la entrega y la cercanía de quienes desde la verdad se dan sin miramientos. Sobran los motivos, pero no los dolores de cabeza y más cuando las decepciones se van acumulando para pena, penita, pena. Lo peor es cuando uno vive en su propio limbo, cree que todos son de fiar y se encuentra con sorpresas que ríete tú de las de Isabel Gemio en su época.

Me encuentro cansado de toda esta situación, porque cuando se depositan esperanzas en alguien y se ve rebajado drásticamente, se cae todo. Y por el peso de lo insólito e inesperado. Ante un contexto tan adverso, por mucho sentimiento e incluso amor de frenesí por medio, nada sirve. Porque en otro caso la rueda seguirá su impulsiva marcha frente a las lágrimas consecuentes. Nada que ni una sonrisa de templanza o un roce de optimismo puedan solventar. Sólo son parches, ya ni consuelo. No se puede subsistir emocionalmente a base de restos, de rincones oscuros reservados como regalo de Dioses.

No sé cómo acabará todo esto. La intuición indica a mal.

sábado, junio 06, 2009

Broteado

Inmerso en una espiral de emociones contrapuestas me hallo descolocado. Y es que el no saber enfrentarse al hecho amoroso es mala cosa. Más cuando la realidad te ha retirado de semejante desparrame y el poder afrontar una situación de latido feliz se vuelve un handicap. Cada día tengo más claro que alguien conjuró en mi contra y que el momento encontradizo de un lover es una clara utopía. Porque parafraseando al molón de Camilo, siempre me voy a enamorar de quién de mí no se enamora... La concatenación de noes, rechazos sin verbalizar, zancadillas de la circunstancia y demás siempre me ha acompañado. De hecho, mis grandes amores -léase también pasiones irresueltas- han sido negadas, con contrapartes que despertaban todo a cambio de nada. Y sigo habitando ese mar confuso, donde los sentimientos se trafulcan y la verdad sigue tan alterada que el apeadero se antoja infinito.

Nunca fui un declarante empedernido. La timidez me vence en los contextos de importancia supina. Pero últimamente lucho contra mi yo profundo, porque quizá despejando dudas o en su intento logre un aclarado tipo Vernel. Aunque los efectos pueden tener contraindicaciones y la pérdida consecuente un drama de tamaña dimensiones que tampoco considero vital. Pero sí que es saludable el dejarse ver, sentir, amar, el no poner barreras sino todo lo contrario. Claro que si el desatino con el objetivo es mayúsculo, la escena es peripatética. Pero más se perdió en Cuba.

sábado, mayo 30, 2009

Si es que...

... nos las dan con queso, por mucho que las hayamos pedido con mermelada. Porque no aprendemos.
... caemos en lo surrealista de lo ajeno, sin atender a lo real de lo propio. Así nos luce el pelo (a los que aún tienen).
... optamos por la ingenuidad sin impostar y retozamos entre la maldad en cúmulo. Mal panorama.
... lanzamos el dardo envenenado a quien no corresponde y dejamos 'de rositas' a los enemigos de buena cara y peores intenciones.
... regalamos el latido a absurdos de entrega cero y palabras que lleva el viento.
... del error no hacemos virtud. Sumamos a la mochila las piedras del camino y los morados del tropiezo infeliz.
... los otros no están de nuestro lado, por muy 'bienpensados' que marque nuestro CV.
... creemos que la entrega es un medio a algo y no es más que la consecuencia de la estupidez de grado más. El balance siempre da mínimos.
... agotamos letras y palabras en desorden, que para decir algo conducen a la nada. Y en espiral seguimos abochornados de nuestra propia existencia.
... el autoentendimiento es cosa fina, el que tiene que ver con los extras más vale dejar en cuarentena, pues la extensión de la bobez acabaría con poblar el todo.

... quién me pone la tecla encima, para dar texto a pesadumbres como éstas. Víctima en propia carne (por blog).

jueves, mayo 28, 2009

Agradecido y emocionado...

Solamente puedo decir, gracias por ser así. A todos quienes desde su cercanía me han demostrado y demuestran ese apoyo incondicional. Mi realidad y mi umbral de exigencia me hacen ser un rancio conmigo mismo, de difícil autogestión y emociones en vaivén. Pero si no fuera por quienes me rodean, me soportan y aconsejan no sé qué hubiera sido de este escribano de futuro incierto. Ellos me hacen mejor y me dan motivos de seguir. Por muchas ausencias y vacíos latentes, los latidos pesan de por sí gracias a los afanados en permitirme su amistad.

Claro está que todo es mejorable, pero sería injusto o más si no pusiera en valor la suma de cariños deslatados que voy guardando en mi cajita deseable. Porque no me puedo olvidar de los deseos, de los te quieros que vendrán y de aquellos que sin pronunciar siempre quedarán. Y es que algunos vienen para quedarse en el cardio interior sin fisuras. Frente a los tirititeros que obligan al mal rato. Qué necesidad de perder un esfuerzo en otros por borrar.

Lo grande es el dibujo en sí, de mi vida y de la sonrisa compartida con tantos que hacen el hoy posible. Como me apuntalaron el ayer y me cimentarán el mañana. Sin esa cuadrilla de obreros de la verdad y el cariño gratuito mi inmobiliaria de la sensiblería cotizaría bajo cero. Ahora está en las nubes y eso que hay ... (ponga ahí la palabra maldita).

sábado, mayo 23, 2009

Simulacro de empacho

Surrealismo puro la canallada sucesiva de hombres imprevistos, bien plantados, de caras complacientes o placenteras o vehiculo de, que arremolinan unas calles mojadas pero de tránsito feliz. Y es que la huida se hace necesaria como la visión del clan guapo que habita en los sueños y viene a la vida a ejercer el papel figurativo. Como el que pasa por casualidad y sin quedarse deja un poso. Así me siento, atesorando sonrisas, ojos en profundidad, rostros delictivos, cuerpos cincelados y deseos por explotar. Hasta que la Carrá entre en acción y explote algo más que el corazón.

Es curioso como el contexto nos define. Cómo nos hace mejores o peores, pero modifica nuestras expectativas, necesidades, prioridades... Volver por Madrid es un aire fresco en unos días grises, de mases sin suma, de caras enquistadas, de palabras que taladran por doquier. El escape se justifica en sí, por los reencuentros y el ejercicio introspectivo. El volver con todo el sentido. El coger la realidad por los cuernos y no dejarse llevar por la maldad que hace imposible cualquier ápice de avance. Pero no es momento de hacer plante ni todo lo contrario. Más vale sacar en bien lo que mis días me dan y dejar vacíos sinuosos para el futuro por escribir.

Aún así no reniego del empacho embriagador de los seres que son sin ser de apropiación. Una lástima que una mala bruja me conjuró. Hasta que no pase su hechizo seguiré vagando como un paupérrimo esperador.

sábado, mayo 16, 2009

Si no fuera él

El dilema del amor siempre ronda una cabeza. Bien por posesión o habitáculo, bien por ausencia lamentosa o lamentable. Me subo al carro segundón y aunque no haga uso del lacrimal sí que reconozco que mi quejío es una constante. Porque a veces los silencios son muy evidentes y el saberse desocupado es un lastre que se enquista. Y salir de ello es una complicación que ningún libro de instrucciones ni un amigo optimista de más conseguirá convertir en levedad. El sentirse malamente no es, por tanto, algo gratuito. Aunque haya días en oferta, el corazón no entiende de marketing y se deja llevar por el sentimentalismo subido. Y qué error puede ser el confiar las naves en una persona, un ser, en considerar a un príncipe como azul, verde o amarillo y ver cómo el tiempo no resuelve la ecuación.

La persecución del amor en vida, que en el más allá quién sabe si se duan los espíritus, es errática. Porque de la espera uno desespera y hasta confunde emociones. O no. Pero la negación se vuelve dardo. Y el sentir que los latidos van por su cuenta y que el muro se construye es doloroso. Puede que no sea. Que la pertenencia sea ajena. Que sus caricias sean de sueño. Pero quiero soñar despierto.

sábado, mayo 09, 2009

De maldiciones e incomprensiones

Últimamente no hago más que preguntarme cómo nuestro mundo se corrompe a la velocidad de la luz y parece que el común gentío no hace nada por evitarlo. Todo en una ceremonia de descrédito generalizada y donde la maldición, en versiones variadas y pixeladas, se apoltrona con picardía funesta. Asistimos a la crítica palabra de familia común, aquí siempre llamada maldita, que nos tiene en un ¡ay! constante. O eso a algunos. Las tiendas están llenas y el ser compulsivo sale con bolsas aunque sus bolsillos se vacíen. Los restaurantes se abarrotan y las reservas se copan. Estas mismas en -s final se beben y beben con ahínco en noches de crápulas infinitos, miradas de falserío y posturas impostadas. Nada es lo que parece. Ni ganas. El consumo viciado, carnal, emocional o extensibles se ha hecho un hueco de gigante. Malamente.

Y las cosas pasan y se colorean en negros y las reacciones están por llegar. Y puede que pierdan su vuelo o facturen con exceso imperdonable. Porque sigo sin entender cómo el aprovechamiento ruin de los jóvenes se ha hecho un continuo. Que si basuras contractuales, becas para salir al paso y ahogarse hasta el cuello, enchufismos electrizantes... Los cálculos no salen y el talento se evapora entre desganas.

Incomprendo, a mi modo, a muchas personas que están de paso y quieren zancadillear a los demás. No sabría adjetivar su pasotismo y su maldad espontánea, con consecuencias. Con ellas haría uso feliz de esa goma de borrar personas con la que siempre he fantaseado. Puede que así me ahorraba malos ratos y sentimientos explosivos. Están otros, los mosquitos muertos. Pero que en su fango siguen picoteando y empeorando el panorama. No siempre se ve venir su aguijón, pero cuidado con, su efecto puede ser letal. La hartura con esos otros sobrantes es máxima. Más porque aún no está a la venta la loción antiparásito social. Si alguien conoce la fórmula que me la haga llegar, que quiero rociar un radio de acción importante.

domingo, mayo 03, 2009

Trastenidos

Aunque el protocolo vía calendario imponga una loa maternofilial, soy de los que piensan que no es necesario ceñirse a lo previsto ni ensalzar en comandita. Ella sabe su importancia y vitalidad. El resto es añadido. Por eso opto por apearme en otra realidad. Tras mucho comentario de lo que ocultan las relaciones emparejadas, las mismas empeñadas en quedarse en tanta superficialidad ajena y no incurrir en el peso de lo oculto, está claro que somos seres de engaño feliz. Con poco nos conformamos y edificamos nuestras concepciones de los otros y sus vidas con una levedad insólita. Todo sea por grandificar nuestro drama y elevar el victismismo y la fatalidad frente a los escaparates plantificados y goteleados de esos otros que miramos con recelo, envidia o pasmo.

Pero saltaré de esa trastienda de los dúos corazoneados, que cada cual se las componga, a la que nos pertenece a los individuos como tales. Como yoes indisolubles. Lo mucho que escondemos y puede que ni nosotros seamos capaces de incorporar. Y es que llevo una sucesión de personajes -más nombre no merecen- que muestran una patita pavorosa de lo que tienen en su museo de los horrores. El saber todo, el resolver su ecuación ya no es ni deseable. Todo apunta a un suceso de dimensiones estratosféricas, unas palabras fuera de lugar, unas visiones tenebrosas. Porque el mostrarse tales cuales es un ejercicio reservado a unos pocos, los transparentes por saberse sin dobleces. En cambio, la masa común se recrea en su doblez, en el cúmulo de mentiras que pasan a medias verdades con suerte. A su espiral de caras -caretos o caretas- que demuestran su falsedad de paseo diario.

Lo digo. Estoy hasta allá de saberme rodeado, ninguneado y falseado. Qué necesidad de construir en engaño. De poner rostro entrecortado, de adular entre egoismos sin dosificar. Recapaciten pues, que el análisis está cuarteado. Y la desazón cuajada.

viernes, mayo 01, 2009

Riada laboral

Desbordado me encuentro ante el cúmulo de obligaciones, necesidades, compromisos, exigencias y demases laboriosos que me hacen pensar en infinito sobre el mismo tema. Creo que la adicción la sobrepasé tiempo y proyectos atrás, pero lo actual no tiene nombre. Quizá haya personificado tanto lo que hago que mi pecho no da a basto para asimilar esa cantidad de requerimientos, de procesos que esmerar... Un caos por lo mucho y los tantos ajenos que requiere. Con satisfacciones evidentes, visibles o audibles, pero con sinsabores que en la actualidad no compensan. No lo hacen por la falta de actitud de quien debiera perder mucho en ello, por la hipocresía incorporada que da pie a ruines a campar a sus anchas, por el cero valor que los entes extrarradios aportan al cúmulo... El panorama no pinta en positivo.

Pero lejos de eso, mi preocupación es el estado vital que me reporta la espiral en que se ha convertido lo cotidiano. Los espacios robados, las ganas volatilizadas, el ansia cronificado y la exigencia supina en choque con la autoestima subsuélica. Pero dicen que el seguimiento es ley de vida hasta que expira. Y parece que pintan bastos. O bastardos. Los mismos que te hacen sentir peor o más. Con esas caras que degollan y reflejan su hipocresía degradada. La pena quedó atrás, como la compasión. El odio va in crescendo. Todo para prejuicio del sentimentalismo poco contemporáneo. Y los que eran dueños de aprecios o quereres se lapidan por deméritos edificados.

Qué aportar en este mar contracorriente de guadianas emocionales y lágrimas sin pozo. Ni el tiempo reconciliará a los Dioses de la cosa nostra. Hagamos lo que hagamos. Y cómo lo hagamos. Ni con trabajo ni sangre. Malamente.

sábado, abril 25, 2009

Salvándome

Por favor, en ruego unilateral practico el rescate casi posible. Y es que pasa cada cosa que impide ese preciado bienestar, frente al surrealismo de lo ya cotidiano. Entre cocodrilos, fantasmas, cacatúas y demás faunas se hace complejo el sacar la cabeza y no mojarse. Llueve para mal y las circunstancias superan el bochorno. Frente de negaciones, críticas, pasotismos, vacíos y palabras chirriantes, el todo empeora el estado de la psique derivada de su propia angustia. Si fuera posible la desconexión sería un recurso obligado, porque la continuidad ahoga y desdibuja. Con resultados más que pésimos...

... Pero queda el camino, el día cual escribano que configurar, las apuestas insólitas por la verdad, la ingenuidad, la cercanía... Porque la hartura de tanto mentecato y mentiroso, pasmados en sus mundos yuppienses es supina o más. Y el colmo del desamor como telón de fondo. El choque mural/emocional. Haciendo pupa y envenenando la herida. Ojalá aparezca el recetario que positive tanto dolor sumado y cronificado. Porque los otros vencen el juego y el mal fario ya pasa de castaño oscuro. ¿Qué (no) está pasando?

sábado, abril 18, 2009

Externalidad

Suposiciones de un mundo mejor. Todo puede llegar, hasta entonces toca el conformar(se). Por mucho patetismo integrado y ejercicios de escapismo necesarios para afrontar la insensatez ajena. Aunque el hecho ermitaño se intuya, más vale un fin penumbroso que unos brillos impostados y adjudicados sine die. Porque visto lo visto y sufrido lo sufrido el ánimo menguante se reivindica para qué. Ni él mismo lo sabe.

En días abruptos de conocimientos estelares, de visitas inéditas, de palabras envolventes y semejantes, casi que trae más a cuenta posicionarse en la ficción que en la realidad. Porque ahí es donde habita el vacío, lo forzado y el esfuerzo por caer en una cotidianidad que espanta. Pero nadie dijo que esto fuera fácil. Y por contrato hay cláusulas que sí o sí. Por eso más vale abstraerse y no pensar con sesudez en lo que cronifica para mal. Como esos ojos por habitar, esos labios que conquistar, pero que el no quiere arrebatar. Cual jarro de agua más helada que fría.

Los pasos sensatos encaminarían hacia un olvido y dejadez de los restos del oscurantismo. Posicionarse en un arcoiris vital, de sonrisa infinita y de buenrollismo como filosofía propia. Pero no sólo la intención actúa en este cabaret, hay cosas de incontrol que no propulsan al cambio real sino todo lo contrario.

Toca sacar hacia fuera esa catarsis de lo maléfico, de los alfileres de pega que vía cromo social han sido algo que no era nada. Limpiar el cristal y verse en el espejo sin la suciedad de la mentira. ¡A por ello!

domingo, abril 12, 2009

Central de Desgana, ¿dígame?

No es un día cualquiera. En realidad es uno más de otros tantos tediosos, de esos que pasan a la carpeta de archivos olvidables. De los que quisieras hacer un recicle infinito por su cero contabilidad en lo memorable, pero que pesan cual losa y se antojan de machaque complejo. Por mucho que mate el tiempo con absurdeces para directamente no pensar, el propio tiempo pasa y el sentimiento de culpa se acrecenta.

Perdón, me entra una llamada -que otra cosa iba a ser-. CdD, Central de Desgana, ¿dígame? No, no. Ese tipo de planes se excluyeron ya, qué sentido tiene pasar una noche con gente insulsa que no aporta nada. Sí, no dudo en el porcentaje de antisociabilidad alcanzable, pero tampoco tiene buen reporte el estar por estar con gentes de paso o de relleno. Gracias por su propuesta, pero será mejor que llame a DnA, Desesperados no Anónimos, donde están esperando como el comer cualquier plan por muy tontuno que sea. Gracias.

Podrán pasar horas hasta una nueva llamada, pero los pierdetiempos o una gominolada como recurso son más útiles que el dejarse ver o caer con seres de hipocresía, de dobles vidas, de palabras que se lleva el viento, del momento pero sin estancia de largo recorrido, dueños del EcincoEstrellas, también conocido como egoísmo de lujo vía visa oro... Con semejante panorama la soledad se posiciona como realidad eficaz, donde el yo profundo de la desgana primordial vence por encima de los restos vacíos de contenido. Y lo triste que la gana viene dada por lo imposible, el reto que ni de superhéroe, la paranoia del colmo, el ser de otra galaxia poco satelital y tal...

Opto por quedarme aquí sentado en la CdD esperando nuevas llamadas que rechazar. No es más que una revisión del sufrimiento pero incorporado a mejor. A qué esperas, ten tu no. Que la desgana vence sola.